Fuimos novios (aflicción y
ocaso)
Si hubiese continuado
el noviazgo con la dimensión jurídica de la integración
(con la cual mantengo -invariablemente- una cordial relación…),
creo que no estaría tan afligido…;
y, probablemente, me comportaría como lo hacen aquellas antiguas relaciones a
las cuales no encuentro desazonadas... (más allá de los “clichés”…). Es como
que la realidad imperante, local y regional de la integración… y sus eventuales
avatares, no entra en conflicto con sus emociones o actitudes…
Será que esas relaciones, a diferencia mía, “mayoritariamente”
no se apartaron de las “orillas” para adentrarse en otros rumbos no siempre
certeros… En otras palabras, no dejaron lo cierto por lo dudoso… logrando
mantenerse en el continente normativo propio de la integración regional o del
Derecho Internacional Privado o Aduanero de los Estados Parte del MERCOSUR… Y
ahí están… en general, en sus cátedras, ejerciendo la profesión, capacitándose,
reuniéndose y, con preponderancia, evitando -en esta materia- las cuestiones
políticas… (algunos queridos amigos ondean, con candor, la bandera de la
asepsia hasta en comarcas de un territorio donde, naturalmente, se generan
vientos políticos… que se perciben sin despeinarse…) y, en menor escala, las
atinentes a la política institucional de la abogacía organizada, etc. Y yo,
desde el costado donde me situé, miro con atención y hasta celebro sus logros,
deseando que nunca se malogren…
Pero resulta que a mí
encuentro salió, como “um sorriso de luz”, otro camino… el cual, siguiendo
sueños, con idealismo tomé…, donde encontré motivaciones y obré… Todo lo vivido,
junto a la dimensión jurídica de la integración, se convirtió en una valiosa
experiencia… para este nuevo noviazgo… está vez, con la dimensión política de
la integración… hasta que nuestros claros horizontes, a partir de diciembre de
2015, se agrisaron…
Sorriso de luz – Djavan
Acaso – Iván Lins
En esta “situación sentimental”, de manera vivencial,
aprendí:
A la integración regional se la podría contextualizar por el legado histórico; la relación existente con la advertencia que reza “en la demora, está el peligro (José Eloy Alfaro)”; la teleología de la política que la construye que, para ser eficaz, debe ser institucional, sostenible y permanente…, el fulgor y el ocaso… al reactivarse iniciativas, cuando se desvanece aquella política, que no la contemplan como una integridad donde, en su complejidad, tiene cabida el amor…
A la integración regional se la podría contextualizar por el legado histórico; la relación existente con la advertencia que reza “en la demora, está el peligro (José Eloy Alfaro)”; la teleología de la política que la construye que, para ser eficaz, debe ser institucional, sostenible y permanente…, el fulgor y el ocaso… al reactivarse iniciativas, cuando se desvanece aquella política, que no la contemplan como una integridad donde, en su complejidad, tiene cabida el amor…
Este noviazgo con la dimensión política de la integración,
como esos “algo más” que constituyen este Blog y el libro “Mi Pulso de la
Integración” (Gowa Ediciones Profesionales – 2018), todavía causan extrañeza… Y
yo lo siento… aun en el silencio… Es que las antiguas relaciones (jurídicas),
como las más recientes (políticas), piensan, me parece, que no fui, ni soy,
leal a la mirada que ellas (juristas, políticos y agregaría amigos y familia)
tenían, o tienen, de mí…
Hace casi tres -3- años
que, por aquella realidad imperante ut supra referida, me siento apesadumbrado…;
conmigo, la actual política regional entró, y continúa, en conflicto con mis
emociones… y ella, la dimensión política de la
integración regional, me pide, con una hermosa balada, que la olvide…
Olvidate – Claudia
Brant
Y es duro… lo admito… y requiero…, examino…, expongo…, para
que no se apague esa ilusión que me había generado esperanzas… Es que cada vez
que la miraba, veía las cosas que podíamos hacer… Ver con nuestras mentes lo
que otros serían capaces de ver con sus ojos… Así el amor le responde al
tiempo…
Resposta ao tempo –
Nana Caymmi
Tristeza en los andenes
– Litto Nebbia
Hoy por hoy, a la
integración regional se la intenta preservar de “novios” como el suscripto… y
para ello le presentan candidatos, algunos muy asentados, que le prometen (todos)
llevarla al altar de la desideologización… (es
decir, donde se eliminan el discurso o intención ideológicos de alguien o algo…
Esto ya se ha planteado en el MERCOSUR y
en la UNASUR [http://drdanielrosano.blogspot.com.ar/2018/01/por-lo-menos-asi-lo-siento-yo.html
y http://drdanielrosano.blogspot.com/2018/05/unasur-vuelvo-al-sur.html]...
habiendo consignado que son los
“sentidos comunes” del liberalismo… y que no está bien escogido el verbo… o se
carece de sinceridad… No es desideologizar, sino trocar… de ideología…).
Creo que esos “otros” posibles “novios” (con los cuales
tenemos visiones en pugna), en correlación con las democracias de pertenencia,
pueden llevar al cementerio a la integración tal como la concebimos… (Véase,
por ejemplo, Ojos Azucarados: http://drdanielrosano.blogspot.com/2018/01/ojos-azucarados.html).
Pienso en el Presidente Macri y en un candidato, agresivo,
desmesurado, tan radical como ramplón, como Jair Bolsonaro… que está a un ápice
de ser electo Presidente de Brasil…
(Digresión: debo, en
primer lugar, remitir al lector a la nota que titulé “Honestamente” -clic aquí:
http://drdanielrosano.blogspot.com/2018/09/honestamente.html-.
En segundo lugar, ratifico lo que
semanas atrás hiciera público: mi apoyo al candidato Fernando Haddad. En tercer
lugar, la carretera que está conduciendo al domingo 28 de octubre se empezó
a pavimentar luego del golpe, en una mascarada de juicio político, que
destituyó al Gobierno de la Presidenta Dilma Rousseff. En cuarto lugar, no hay que perder de vista el rol de las Fuerzas
Armadas… que se “insinuó” en el contexto del enjuiciamiento a Lula… En quinto lugar, como la única verdad
es la realidad, en Brasil está prevaleciendo un marcado sentimiento “AntiPetismo”…
Hay que derrotar al Partido de los Trabajadores (PT)… ¿y después? Y después se
verá…!!! Por lo tanto, antes que el PT, es preferible Bolsonaro… Estoy
convencido que muchísimos brasileños votaron a Bolsonaro -y lo volverán a
hacer- sin exteriorizarlo previa y públicamente… He leído que a Bolsonaro se le
puede endilgar ser homofóbico, misógino, racista, torturador, o que añora a la
dictadura militar… pero que no le pueden decir corrupto… (como a la vieja
política…); y, por lo que vemos, al “mercado”, poco le interesa lo que él dice…
En sexto lugar, se señala al PT como
el responsable de todos los problemas del Brasil. Por supuesto, no falta la
mácula de su “proximidad” a Venezuela… [se le enrostra al PT que se “asombra”
de Bolsonaro pero que no se pronuncia con la misma virulencia ante las violaciones
de los Derechos Humanos en Venezuela]. Todo es desencanto y bronca… pero,
principalmente, contra el PT… [mi ligazón con Brasil es de toda la vida… y yo he
constatado, hasta familiarmente, la crispación…]. En séptimo lugar, como aquí el PJ, el PT está siendo asociado a lo
delictual... -tiene a su máxima figura política, “Lula”, preso en Curitiba… [a
la distancia, me parece que injustamente… así como sostiene una pléyade que
esta elección, sin Lula, es un fraude…]-. Y
en octavo lugar, interpreto que Jair Bolsonaro es depositario de la confianza…
de que algo cambie… y haya mejoras…; y eso es lo que no estaría pudiendo
representar el PT… En una metonimia: Bolsonaro significa futuro, “Ordem e
Progresso”. Haddad/PT, en cambio, pasado, corrupción y mentira).
Aunque no quiera, debo comprender,
aceptar y respetar el adiós… de esa dimensión política de la integración
regional… Es tarde (hace mucho que la noche llegó), me
voy a acostar… y sé que lo haré, más de una vez, con su sueño… porque, pase lo que pase, nunca dejaré de soñar…
Nunca dejes de soñar –
Gabriel Ogando
Noites com sol – Flávio
Venturini
Quilmes,
20 de octubre de 2018
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