Pensamientos…
Pensamientos… quizás abigarrados… en una tarde, de la tarde de mi vida…
Reflexiones e interrogantes… desde el ASPO (aislamiento social, preventivo y obligatorio); y, en mi caso además, desde la segunda acepción (en el Diccionario de la Real Academia Española) de la palabra ostracismo…
¿Qué edad cronológica transita, hoy en día, la integración regional?
Reparar en el “crono” de la integración regional implica sumergirse en la historia de América del Sur.
Oteo el horizonte… y descubro la cada vez más nítida figura del 30° Aniversario del MERCOSUR (marzo de -1991- 2021)… MERCOSUR que, sin embargo, aún no ha conquistado su ideal…; inmediatamente, no consigo sustraerme del recuerdo de la enseñanza, a sangre y fuego, acerca de la significativa diferencia existente entre independencia y libertad en la historia de nuestra América del Sur…[1].
Transcurrieron ya más de veinte -20- años de una disertación donde expuse: “…lamentablemente observamos que en el breve lapso de quince -15- años corridos, desde 1810 hasta 1825 con la República de Bolivia, la primitiva extensión del Virreinato del Río de la Plata se había reducido a la mitad”[2].
Siguiendo el ideal de Bolívar[3], es decir grandes estados, no desgajados o fragmentados, una gran patria… con fuertes alianzas entre sí e intereses comunes… la integración regional, o unidad continental, ínsita en los mismos, hubiese vivificado y alumbrado… Pero, mezquinamente, se impusieron las patrias chicas…
¿Se asemejan los retornos de Bolívar a Colombia (en 1826) y de Perón a nuestro país (en 1972)? En mi opinión, creo que la respuesta afirmativa, en general, se impone.
De manera cabal, no fueron comprendidos…
Sus personalidades fueron vituperadas y sus ideales traicionados…
Camino a sus sepulcros (1830 – 1974), se conmovieron ante magnicidios (los de Antonio José de Sucre y José Ignacio Rucci).
Sus decesos afectaron el ideario de la integración regional…
¿A la integración regional se la ha infiltrado por derecha e izquierda?
La integración regional debe estar por encima de lo partidario… y llegar a ser trascendental… para alcanzar el bien común (y subrayo la felicidad) de los pueblos…
Su finalidad, entonces, no puede ceñirse a la exclusiva realización de su derecho positivo ni a la reducción de sus ciudadanos a meros consumidores…[4].
Hoy más que nunca coincido con Bolívar: “Moral y Luces son nuestras primeras necesidades”.
If I could change your mind - The Alan Parsons Project y Lesley Duncan
Quilmes, 28 de septiembre de 2020.